El Camino

El sufismo es un antiguo camino que conduce al autoconocimiento y a una conciencia superior. Desde los albores de la humanidad, todos hemos buscado el sentido de la existencia: ¿Quién soy? ¿Por qué estoy aquí? ¿Cuál es mi propósito en este mundo? ¿Por qué hay sufrimiento y miseria? ¿Cómo puedo alcanzar la felicidad infinita? Descubrir quiénes somos y cuál es nuestra vocación es una necesidad humana fundamental.
El sufismo ofrece respuestas a todas estas preguntas. Todos los maestros que han venido y, en su búsqueda de sí mismos, se han dado cuenta de que provienen de la fuente primordial de la creación, la base de toda existencia, el Único. Las enseñanzas de los maestros sufíes, que se han transmitido de generación en generación, describen el camino que conduce hacia el interior, los peligros que acechan a lo largo del camino y las trampas que hay que evitar. Son personas como tú y como yo, pero hay una diferencia: ellos han recorrido el camino y han alcanzado la maestría.
El aspirante se entrega a este maestro, el llamado jeque. Él guía al estudiante a través de los niveles más profundos de su ser, a través de un túnel oscuro, por así decirlo, hacia la luz del autoconocimiento. «He muerto mil veces», como dice el sabio refrán. El sufí también muere; aprende a desprenderse de todo lo que le obstaculiza en el camino hacia la conciencia. Todos los deseos y necesidades egoístas, todas las creencias e ideologías que son obstructivas, dan paso al poder de la luz y la verdad. A través de este proceso de muerte y despertar, el buscador sincero es guiado por la mano del maestro.
La cadena de oro
El honorable camino sufí Naqshbandi es una escuela del espíritu y una práctica que se basa ante todo en la verdad.
El nombre de la orden Naqshbandi ha cambiado a lo largo de los siglos. En la época de Shah Naqshband se la conocía como «Naqshibandiya». Naqsh significa el grabado perfecto del nombre de Dios en el corazón del buscador. Y hoy en día se la conoce con el nombre de «Naqshibandiya-Rabbaniya».
En el camino del renacimiento y la experiencia de la presencia divina, es importante tomar conciencia de la presencia de Dios. Este camino es el reflejo perfecto de la perfección. Es el camino de la santificación de su ser a través de la lucha constante contra su propia alma inferior, el ego. Comienza con la atracción y el abrazo del amor divino absoluto, que una vez fue concedido al primer amigo del Profeta (sav), Abu Bakr (ra).
Su conocimiento y sabiduría se han transmitido a lo largo de los siglos a través de una cadena ininterrumpida de 40 grandes jeques hasta la actualidad, y hoy en día siguen vivos en el gran jeque Nazım al-Haqqani.
A lo largo de las últimas décadas, Sheikh Nazım Efendi se ha convertido, gracias a su sinceridad, en uno de los líderes espirituales más importantes de nuestro tiempo. Su influencia no deja de crecer tanto en Occidente como en las zonas tradicionalmente musulmanas.
Es el cuadragésimo jeque de la Naqshbandiya, una orden sufí que tuvo su origen con el profeta Mahoma, la paz sea con él. Según la creencia sufí, el profeta recibió el conocimiento divino, que transmitió de corazón a corazón a sus sucesores espirituales.
Der Gesandte Gottes und Heilige Prophet Muhammad ibn Abdullah
Sheikh Abu Ya`qub Yusuf ibn Ayyab ibn Yusuf ibn al-Husayn al-Hamadani
Sheikh Mahmud al Faghnawi
Sheikh Ali Ramitani
Sheikh Muhammad Baba Sammasi
Sheikh Qutub at Tariqah Shah Bahauddin Naqshband al Uwaysi al Bukhari
Sheikh Alauddin Muhammad al Attar
Sheikh Ya'qub al Charkhy
Sheikh Ubeydullah al Ahrar as-Samarqandi
Sheikh Muhammad az Zahid
Dervish Muhammad al Bukhari
Sheikh Hajegi Emkeneki as Samarqandi
Sheikh Muhammad al Baqibillah as Samarqandi
Sheikh Mujaddid al Alf ath Thani Imam Rabbani Ahmad Faruq as Sirhindi
Sheikh Urwat ul Wuthqa Muhammad Ma'sum ar Rabbani
Sheikh Haji Sayfuddin ar Rabbani
Sheikh Nur Muhammad al Badwani
Sheikh Habibullah Mizra Jan i Janan al Mazhar
Sheikh Ghulam Ali Abdullah ad Dehlawi
Sheikh Ziyauddin Abu Naasan Muhammad Khalid al Baghidadi ash Shami
Sheikh Mehmet Adil ar-Rabbani

